Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), una persona debe ingerir más de 400 gramos de frutas y verduras a diario para mejorar su salud en general y reducir el riesgo de presentar ciertas enfermedades no transmisibles (ENT).

¿Alimentación sin frutas y verduras?

Siempre ha sido un problema que los niños y adolescentes consuman frutas y verduras en forma voluntaria, no queremos generalizar, porque siempre hay excepciones, ¿cuáles serán las razones?… ¿será el ejemplo de los adultos?… ¿será que no les enseñamos a comer frutas y verduras?… ¿no nos damos el tiempo para preparar comidas con frutas y verduras? pero, ¿por qué no pasa lo mismo con la comida chatarra? no hay niño que se resista a la comida chatarra, o al menos a la mayoría le gusta.

Las razones pueden ser muchas, con razón o sin razón, de lo único que tenemos certeza es que hay que incluirlas en la alimentación, porque la falta de ellas provoca muchas deficiencias alimenticias y a la larga algunas enfermedades.

Se proponen 5 raciones diarias entre frutas y verduras, 3 de frutas y 2 de verduras diariamente, recalco diariamente, porque muchos creen que comiendo dos o tres raciones a la semana está bien.

Lo recomendable es consumir la fruta de la temporada, suelen ser más sabrosas, más económicas y con menor impacto medioambiental, de distinta textura, color, aroma y sabor, para que aporten mayor variedad de nutrientes. Lo ideal es entera, no triturada ni en forma de jugos.

Las verduras crudas son una excelente alternativa a la hora de almuerzo, por la noche pueden ser cocidas, ya que crudas se demora más la digestión.

Siempre asociamos una dieta saludable incluyendo frutas y verduras, si deseamos hacer una dieta para bajar de peso, incluimos frutas y verduras, pero ¿qué sucede si no las consumimos regularmente?

Sin frutas ni verduras se reducen las defensas del organismo, ya que contienen muchos micronutrientes, que son responsables de nuestro sistema inmune sano.

Nos quedamos sin vitamina C, ya que esta vitamina se encuentra casi exclusivamente en estos alimentos y su carencia puede dar origen a bajas defensas, problemas de coagulación y anemia entre otros.

Se corre el riesgo de no cubrir la cuota de fibra en la dieta y dando origen a problemas intestinales y digestivos, tales como el estreñimiento.

Aunque no lo crea, nos volvemos menos atractivos, ya que las frutas y verduras nos ofrecen carotenos, vitamina A, vitamina C y mucha agua, que incide en nuestra belleza, sobre todo a nivel de la piel, por lo tanto, la carencia de frutas y verduras también afecta a nuestra estética.

Tenemos mayor riesgo de sufrir problemas cardiovasculares, porque restamos contenido acuoso y potasio a la dieta y junto con la fibra previenen aterosclerosis, problemas circulatorios e hipertensión entre otros.

La lista es mucho más larga, ya que las consecuencias de no consumir frutas y verduras de manera habitual, reduce nuestras defensas y en consecuencia estamos más propensos a adquirir alguna enfermedad.

Muchas veces no sabemos en qué momento del día consumir las frutas, ya sea por nuestros horarios de trabajo o estudio, por lo acelerada que es la vida, o porque es más fácil comer algo rápido y al paso.

Una buena opción para incluir las verduras en nuestra dieta diaria, es prepararlas como ensaladas crudas o cocidas.

Usando la imaginación y creatividad, podemos hacer magia con la comida y nuestros hijos comerán sin notar que son verduras. Con la fruta, el mayor problema es la pereza de lavarla o pelarla y cortarla, pero como dijimos antes, se puede tener lista en la nevera congelada.

No debe de existir pretextos para no comer frutas y verduras; ya que como mencionamos más arriba son parte fundamental de nuestra dieta diaria. Las verduras y frutas son imprescindibles para los niños debido a la gran variedad de propiedades que contienen y a los beneficios que presentan para los más pequeños. ¡A comer verduras y frutas se ha dicho!

 

Lic. Fátima Rojas Villanueva.
Nutricionista- Especialista en Nutrición Clínica y Dietoterapia.